«Te seguiré adonde vayas»

EVANGELIO DE HOY Lucas (9,57-62):

En aquel tiempo, mientras iban de camino Jesús y sus discípulos, le dijo uno: «Te seguiré adonde vayas.» Jesús le respondió: «Las zorras tienen madriguera, y los pájaros nido, pero el Hijo del hombre no tiene donde reclinar la cabeza.»

A otro le dijo: «Sígueme.» Él respondió: «Déjame primero ir a enterrar a mi padre.»

Le contestó: «Deja que los muertos entierren a sus muertos; tú vete a anunciar el reino de Dios.»

Otro le dijo: «Te seguiré, Señor. Pero déjame primero despedirme de mi familia.»

Jesús le contestó: «El que echa mano al arado y sigue mirando atrás no vale para el reino de Dios.»

PARA VIVIR LA PALABRA

Hoy nos presenta el Evangelio tres casos de aspirantes al seguimiento de Jesús. Dos espontáneos y otro a quien Jesús invita a seguirle. El primero parece decidido. Pero Jesús le aclara lo que esto lleva consigo. Para seguirle no se pueden abrigar otros intereses que el puro seguimiento. Él es la recompensa y el interés único que motiva la elección. “Quien a Dios tiene nada le falta” diría Sta. Teresa.

El segundo también está decidido a seguir a Jesús que le llama. Pero esa decisión queda empañada por alguna preocupación previa: «Déjame primero ir a enterrar a mi padre.» Jesús no quiere corazones divididos. Tiene poder para velar sobre nuestros seres queridos, cuando se trata de dejar padre, madre, etc. por seguirle. Incluso ofrece el ciento por uno y la vida eterna a aquellos que ya han dejado a sus seres queridos por Él. «Tú vete a anunciar el reino de Dios.» De lo demás ya me encargo yo, pudo añadir. Hemos de confiar en Él sin límites, con la seguridad de no equivocarnos. Él nunca nos defrauda.

Y el tercero nos recuerda la urgencia e importancia de la misión para la que nos llama. Hoy quizá no nos hacemos cargo de este hecho. Y es posible que también interpongamos condiciones y escusas a la llamada que nos hace a todos sus discípulos a Evangelizar, olvidando que en todo momento Dios es primero. El Papa Francisco nos lo recuerda en su oración a María: “Virgen y Madre María,… ayúdanos a decir nuestro «sí» ante la urgencia, más imperiosa que nunca, de hacer resonar la Buena Noticia de Jesús.”

“Estas exigencias pueden parecer demasiado duras, pero en realidad expresan la novedad y la prioridad absoluta del reino de Dios, que se hace presente en la Persona misma de Jesucristo. En última instancia, se trata de la radicalidad debida al Amor de Dios, al cual Jesús mismo es el primero en obedecer. Quien renuncia a todo, incluso a sí mismo, para seguir a Jesús, entra en una nueva dimensión de la libertad, que san Pablo define como «caminar según el Espíritu» (cf. Ga 5, 16). «Para ser libres nos libertó Cristo» —escribe el Apóstol— y explica que esta nueva forma de libertad que Cristo nos consiguió consiste en estar «los unos al servicio de los otros» (Ga 5, 1.13). Libertad y amor coinciden. Por el contrario, obedecer al propio egoísmo conduce a rivalidades y conflictos.” Benedicto XVI, papa Ángelus (27-06-2010): Trabajar con Cristo.

Que tengas un buen día, libre para seguirle.